También en Mazatlán hacen historia.
Por amplia mayoría de votos de la fracción del PRI, Nueva Alianza, Morena y algunos del PAN y del PAS, el cabildo de Mazatlán rechazó la cuenta pública del último trimestre del 2016, o de la anterior administración municipal pasada, por presentar un pasivo sin fuente de pago.
Ricardo Ramírez, coordinador de la Comisión Hacienda último trimestre 2016, dijo se excedieron los gastos para el ejercicio presupuestado en ese año.
En cumplimiento a la ley se remite la cuenta octubre, noviembre y diciembre para que se pase a la auditoria superior del Estado, dijo Ramírez.
El tesorero municipal, Ismael Barros, a quien se le dio la voz previa autorización de los regidores, dio un detalle sobre poco más de 57 millones de pesos que no están presupuestados.
Giova Camacho del Partido Sinaloense, considero que esa fracción se abstendría de votar por ser un dictamen confuso.
Por parte del Partido Acción Nacional se dijo que esos pasivos fueron por atender necesidades de la población.
José Antonio Crespo, representante de Morena mostró un informe de la Auditoria en donde se señalan irregularidades financieras y menciono que es un caso muy serio como para dejarlo en el aire.
Guadalupe Valle hablo del Arrendamiento de vehículos. En octubre se pagó una factura de 4 millones 624 mil 670.26 pesos; en diciembre fue de 6 millones 822 mil 856.76 pesos; por lo que en el año la cifra fue de 48 millones en el años y en el trienio cubrieron más de 120 millones en ese rubro.
Celia Jáuregui del Partido Acción Nacional señalo que el principal problema es el fondo en el uso de los recursos.
Fueron 17 los regidores que rechazaron los numero de la administración pasada, dos del Partido acción Nacional y uno del PAS fue de abstención.
