El cuerpo encontrado junto a la carretera internacional Mazatlán Matamoros, en el municipio de Concordia, tenía un mensaje de amenazas.
La leyenda escrita en una cartulina de colore blanco va dirigida a los rateros y asaltantes y se menciona que eso mismo les va a pasar a todos; menciona dos nombres.
El hombre estaba boca abajo, con las manos y pies atados con una cuerda de color amarillo. Estaba en calzoncillos azul cielo, sudadera de color negro con aparente letrero de Adidas.
En las piernas se le aprecian supuestos tatuajes, pero no se la alcanzaron a distinguir, aunque puede tratarse de moretones por golpes.
Sus restos se encuentran en el servicio Médico Forense